En ocasiones, es posible que no quieras recibir correos de determinadas direcciones, para lo que puedes crear listas negras. Las listas negras, o blacklists, permiten bloquear todos los emails provenientes de una dirección de correo concreta.
Para configurar tu propia blacklist, sigue los siguientes pasos desde el cliente de webmail que utilices:
1. Ve a la pestaña de correo de tu cliente y revisa qué filtros tienes configurados, en caso de que hayas establecido alguno.
2. A continuación, revisa las reglas que hayas establecido para los correos electrónicos que lleguen a tu bandeja de entrada. De forma que puedas establecer las preferencias en cuanto a la recepción de emails. Para poder añadir direcciones a la lista negra que configures, verifica que las reglas se encuentren de la siguiente manera:
3. Una vez configuradas las reglas, ve al apartado de lista negra, donde podrás determinar qué sucederá con los correos que recibas de las direcciones que se encuentren en tu blacklist: eliminar esos mensajes, marcarlos como eliminados o moverlos a una determinada carpeta. Después, indica las direcciones de las que ya no quieres recibir notificaciones.
Así, una vez configurada tu lista negra, tu bandeja de entrada estará limpia de correos no deseados.