Si bien una de las principales ventajas de la plataforma de Google es la autogestión de la gran mayoría de sus servicios, también puede ser un gran inconveniente. La autoescalabilidad de Google Cloud Platform puede disparar la factura mensual al considerar un pico puntual, por ejemplo, en un periodo de promociones, como el consumo habitual y, por tanto, necesario para el funcionamiento de tu proyecto web.
Para evitar este tipo de situaciones con la gestión de servicios Google Cloud Platform nos encargamos de mantener el sistema actualizado a la vez que controlamos el consumo real de los recursos. Así, te notificaremos cuando sea necesario aumentar los recursos porque lo requiera el proyecto, de forma que solo pagues por los recursos que verdaderamente necesitas para el funcionamiento de tu sitio web.