¿Qué ventajas aporta a tu web el diseño responsive?
La popularización de internet ha provocado que el número de dispositivos móviles haya aumentado considerablemente. De forma lógica, de la mano de este aumento de smartphones ha llegado el número de conexiones que se realizan desde estos. Por ello, a la importancia de contar con presencia online, se suma el hecho de que hayamos creado una web con diseño responsive.
El diseño responsive o adaptativo es una técnica creada y extendida por el diseñador web Ethan Marcotte allá por 2008. Una idea que surgió a partir de una recomendación del W3C (World Wide Web Consortium) sobre la necesidad de desarrollar una web única a la que pudiera accederse desde cualquier dispositivo móvil. Catalogado como una de las mejores prácticas de diseño web, una web con diseño responsive se caracteriza por su capacidad de adaptación a cada tipo de pantalla. Algo que sucede con independencia del dispositivo que se está utilizando para el acceso al sitio web.
El diseño responsive es el resultado de la redimensión y recolocación de cada uno de los elementos de la web. Una ‘magia’ que tiene como objetivo primar la correcta visualización de la web y que es posible gracias a estar diseñadas en CSS3. Por todo ello, está catalogado como una de las mejores prácticas existentes en el diseño web actual.
Las ventajas de la web con diseño responsive
- Mejora del posicionamiento SEO. Google prioriza en los resultados de búsquedas aquellas webs que cuentan con un diseño adaptativo. De esta forma, no solo se obtienen mejores puestos en el ranking, sino que además se cubre un mayor tráfico al ser un sitio web visible desde cualquier dispositivo.
- Enriquece la experiencia del usuario. Un sitio web que sea responsive favorece la usabilidad, Otro de los conceptos más importantes del diseño web y que se traduce en una mejor experiencia de navegación; que propiciará un aumento en el ratio de conversión de la página.
- Mejora los resultados estadísticos. Además de permitir la segmentación de los usuarios y conocer cuál es el tipo de dispositivo desde el que se accede, el diseño adaptativo reduce los errores derivados de los llamados social links. Y no solo eso, sino que propicia la viralización del contenido.
- Evita la duplicidad del contenido. Un diseño responsive hace que no sea necesario repetir el mismo contenido para cada versión de una web. Recurriendo a esta técnica de diseño, es posible proporcionar el mismo contenido a todos los usuarios y se contribuye a la mejora de la experiencia de navegación.
- Reduce costes y tiempos de desarrollo y mantenimiento. Gracias a un diseño responsive se evita tener que desarrollar diferentes versiones de la web para cada dispositivo. De esta forma, además, las tareas de mantenimiento se simplifican y agilizan, ya que solo será necesario realizar cambios en una URL; en lugar de tener que modificar cada una de las versiones existentes.
En conclusión, que una página web sea responsive es actualmente algo casi obligatorio. De lo contrario, puedes estar perdiendo visitas como consecuencia de un mal posicionamiento. Además, afectará negativamente a la experiencia que tu sitio web proporciona a todo aquel que la visita.