Las llaves SSH son una forma de autenticación que posibilita la conexión a un servidor cloud sin necesidad de contraseñas. Para poder funcionar, las llaves SSH necesitan de una llave privada y otra pública.
- Llave Privada. Es la que se genera en tu equipo y que te permite establecer conexión con los servidores que conozcan la llave pública generada a partir de esta. Es muy importante que nunca se comparta la llave privada y que la guardes a buen recaudo, ya que es la única forma de acceder al servidor y de abrir la llave pública.
- Llave Pública. Para poder conectarte, deberás copiar la llave pública al servidor. Así, podrás acceder a él utilizando la llave privada de tu ordenador.
Aunque lo habitual es configurarlas con un cifrado RSA de 2048 bits, estos valores pueden variar. El hecho de utilizar unos valores más o menos altos supondrá que la contraseña será más o menos segura. En este caso, con un cifrado de 2048 bits, la contraseña tendrá unos 617 caracteres.
Ten en cuenta que el uso de llaves SSH es típico de GNU/Linux. En los servidores que utilizan Windows como sistema operativo no es habitual recurrir a este método de autenticación.