Tiene más años de los que parece, aunque aún no ha terminado de explotar todo su potencial. Bizum llegó al mundo en 2016 coincidiendo el momento perfecto con la manera más adecuada de hacer llegar una solución de pago que lo revolucionaría todo. En algunos dispositivos ha aterrizado hace poco, pero Bizum ya está planeando su siguiente movimiento: el pago mediante código QR.
En un momento en el que las entidades financieras parecían estar más a la gresca que nunca, deciden unirse para crear un producto único. Y el resultado ha sido todo un éxito. Inicialmente parecía estar destinado a ser una forma de transferencias inmediatas y sin comisiones; pero con el tiempo y las circunstancias que rodean estos últimos meses se ha erigido como una novedosa forma de pago.
Si en 2019 casi todos teníamos Bizum, la llegada de 2020 hizo que muchos más utilizásemos la aplicación. Una cifra que ha seguido aumentando durante este 2021, ya que muchos negocios han ido adoptando esta solución de pago para facilitar las compras de sus clientes; además de suponer una forma de pago más segura y sencilla, si lo comparamos con el intercambio de monedas en medio de una pandemia mundial.
Ahora quiere hacerse un hueco en los comercios físicos, y terminar de conquistar al online, recurriendo al código QR. Aunque ninguna de las tecnologías que van a emplearse es una novedad, sí lo es la forma en la que se quiere trasladar al comercio tradicional.
Conscientes de que facilitar el uso de la aplicación a sus clientes, los bancos han cedido parte de su histórico terreno. Probablemente Bizum sea el único servicio que los bancos ofrecen de forma gratuita. Y no solo eso, sino que son las propias entidades bancarias quienes afrontan el pago de las cuotas de uso del sistema y, además, quieren ir un paso más allá.
En los próximos meses se espera que Bizum se convierta en un servicio totalmente compatible con los códigos QR; lo que haría que utilizar la aplicación sea aún más sencillo. Así, comprar un producto o realizar una transferencia únicamente requeriría del escaneo de un QR generado por un usuario, en el caso de los pagos a particulares, o por el negocio si hablamos de compras. Una experiencia que tiene un buen precedente: el sistema que se desarrolló en colaboración con Loterías y Apuestas del Estado que permite el abono de apuestas y el cobro de premios a través de QR.
Esta segunda revolución de Bizum también contribuiría a darle más vida a un sistema que nació con mucha fuerza, pero que fue perdiendo fuelle al poco tiempo. Y es que no podemos olvidar que los QR estaban casi desterrados, hasta que llegó una pandemia que limitó el contacto y nos obligó a un metro y medio de distancia.
Para que el uso de Bizum mediante código QR tuviera éxito no serviría únicamente con el uso de la aplicación. Los comercios deberán realizar la implementación correspondiente para poder sacarle el máximo partido a este nuevo método de pago. A pesar de que algunas tiendas vienen utilizándolo desde hace algún tiempo, al tratarse del mismo uso que haría un usuario particular, existen algunas limitaciones. Por ejemplo, es necesario proporcionar un número de teléfono, por lo que el sistema actualmente no es del todo adecuado para una tienda. Además, actualmente pueden realizarse un máximo de 150 operaciones al mes, una cifra que se reducirá hasta 60 a partir de junio.
Con este cambio por parte de Bizum, y teniendo en cuenta que se trata de una aplicación fruto de la colaboración de diferentes entidades bancarias, el pago mediante TPV podría perder su reinado. Una posición de poder a la que ya tuvo que renunciar el dinero físico y, hace no tanto, el uso de la tarjeta de crédito en favor del NFC de nuestros móviles.
Al final el dinero es un poco como la energía: (ya) ni se crea ni se destruye, solo se transforma.
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